Entrada 30

Ya han pasado algunos meses desde que no toco esta computadora para escribir, me va a costar un poco antes de volver a acostumbrarme, ¿porqué no me cuentan ustedes un poco de cómo ha sido su nuevo año? Espero que mucho mejor que el mio. 

Bueno, retomando lo que ha sucedido desde entonces, sabrán que Jae llegó a mi departamento porque fui yo el que le busco con urgencia, es difícil describir con claridad ahora lo que sucedió aquella extraña noche, la verdad es que justo ahora quisiera olvidad algunos detalles, y creo que mi cabeza se ha esforzado por ello porque solo tengo tintes de lo que sucedió.

Jae estaba besándome, diciendo todas aquellas cosas a mis oídos tan excitados, mis manos estaban desesperadas por aferrarse a su cuerpo, mi boca tan sedienta que no podía dejar de besarlo, ya era todo, yo Shim Changmin quería todo con mi mejor amigo, nada en aquel instante hubiera podido parar lo que estábamos haciendo en la oscuridad de aquella habitación, dónde nadie nos vería, ni nos juzgaría por nuestras acciones.

Si el estaba sobre mi, o yo sobre el la verdad no lo tenía claro, no sabia si arriba era abajo o al revés, porque estaba prendido de Jae, de su esencia entera, embriagado por completo, incluso respirar ya era difícil, cara toque de sus manos en mi piel desnuda era fuego.

Habíamos cambiado de lugar en algún momento.

Mis manos bajaron con lentitud, me aferré a su trasero pegándolo a mi cadera, todo por esta necesidad que estaba sintiendo, esa necesidad de sentir su intimidad rozando con la mía, no pude evitar gemir por tal acción, era tan grande el calor que sentía el sudor bañar mi cuerpo. Mis dedos temblorosos se atoraron con el broche de su cinturón, sus manos se posaron sobre las mías, dirigiéndome para que pudiera abrirlo, estaba tan desesperado como yo… pero así como yo…también el estaba explorando en mi cuerpo, pude sentir el empalme de caricias, me frené de golpe y de un modo caso inconsciente lo aleje de mi

-¿q-qué pasa Min?..- había preocupación en esos ojos tan aturdidos

Podía sentir, las caricias de Jae tan diferentes a los agresivos toques de Yunho, sentía que estaban empalmadas, una sobre la otra, deseaba sentir a Jae pero por alguna razón la sombra de aquel ladrón se estaba interponiendo.

Lo mire suplicante, y el pareció entender porque me abrazo con fuerza, acariciando mi cabello y me sentí frustrado, humillado como hombre.

Escuché el insistente llamado de mi puerta, ¿quién era a esas horas?, no esperaba a nadie, solo quería pasar la noche con el y nada más.

“-Changmin…soy Yunho…son las cuatro de la madrugada…sé que estás ahí…te ruego que me recibas…te juro que…no entiendo nada…- “

Al escuchar esa voz mi cuerpo entero se paralizo, Jae se paró con velocidad y fue a recibir a mi…

…invitado no deseado… ni siquiera tenía la cara para verlo…

12va Entrada

Repasaba en mi cabeza…un y mil veces…aquel beso…era la primera vez que me sentí…intimidado por alguien…

…agradecí el hecho de que saliera conmigo…incluso que se tomara el tiempo de escucharme…pero la verdad es…que yo…apreciaba más…no puede ser que esté pensando esto…no ahora que mi vida es un desastre…aún tenía en mi mente a Jae… y aún debía arreglar mis asuntos con Min…esto es tan vergonzoso…pero aquel beso…me causaba esa extraña sensación de… ¿emoción?... ¡ah! Yunho….ya que estoy siendo honesto…es que deseaba verlo de nuevo….pero no quería herir de nuevo a alguien y no recordarlo…tuve que detenerme e irme en ese momento…había sido tan cobarde que solo… pude ofrecerme a llevarlo de vuelta a su casa…espere a que entrara y estuviera fuera de mi vista…y no sé cuánto tiempo estuve ahí….pero no fue hasta que me sentí tonto viendo la puerta cerrada frente a mi…que reaccione…subí a mi auto…y me fui…

Maneje durante horas…me pare enfrente del bar donde había conocido a Jae…y también estaba forzando mi cabeza a recordar aquella cosa tan grabe que había olvidado…de pronto recordé aquel extraño chico… ¡Junsu!...había mencionado que conocía a Min, así que le mande un mensaje –Junsu… ¡hey! Soy Yunho…el que te llevo al hospital luego de que se te pasaron los tragos… ¿podrías mandarme la dirección de  ese chico Changmin?...prometo pagártelo después- …tenía algo de experiencia…sabía cómo hacer que un mensaje sonara coqueto…y sin importancia…aun cuando lo fuera… espere un rato a que respondiera… y de alguna manera, sorprendentemente respondió casi de inmediato –“si mal no recuerdo…tú me pasaste de copas… no te equivoques… ¿la dirección de Changmin?...claro…pero deberás pagarme mucho por esta información…ya que es clasificada…es…”- sonreí al leerlo…realmente precia un muchacho interesante…subí a mi auto….le mande un mensaje de agradecimiento y…fije rumbo a casa de Min…

No estaba tan lejos de donde me encontraba…me estacione, baje… subí las escaleras…mire la puerta blanca frente a mi…toque tres veces…

-Changmin…soy Yunho…son las cuatro de la madrugada…sé que estás ahí…te ruego que me recibas…te juro que…no entiendo nada…- suspire y recargue mi cabeza en su puerta…creo que esa laguna mental…nunca sería llenada…

…hasta que escuche un golpe seco…y la puerta se abrió…

Kiss x Kiss

Lamento la demora... Entre trabajo y tantas cosas, no me ha dado el tiempo de actualizar...

Estabamos en aquel lugar... Donde todo se torno extraño... Ni siquiera me di cuenta de ello hasta que llegue a casa y me tumbe en mi cama y me puse a pensar en lo ocurrido...

Vamos por orden....

Habiamos llegado a un lugar... Ni recuerdo como ni donde... Entonces entablamos una amena co.versacion con risas... De pronto senti un aire rozar rapidamente mi rostro... Senti que Yunho me agarraba de la chaqueta... Todo fue rapido... Tan rapido que ni siquiera note cuando, como ni que desato aquel beso... Ni tampoco se porque se lo respondi.
Lo aprisione un poco contra la baranda... Y ya... Ahi estaba, a vista de cualquiera que pasara por ahi, besandolo... Besando a un hombre!

Demonios, Yoochun... Eres... Raro...

El beso se corto por la falta de aire de parte de ambos y nos miramos en silencio... Completamente avergonzados...

Ambos seguimos asi, hasta que Yunho hablo y me dijo:
- lamento... Lo de hace un rato... No tenias por...porque responderlo...
Me quede en silencio... "ni siquiera yo se por qué lo hice..."pensé...
Yunho camino hacia su auto y luego me miro...
- te llevo a tu casa? - lo mire un tanto extrañado... ¿solo eso?
- ok.... -camine y me subi.
Todo el trayecto fue en un incomodo silencio y apenas yo hable para decirle donde debia dejarme. Una vez en casa, me.despedi educadamente y me baje.
-gracias....-dijo antes de que bajara- fue un momento grato..y nuevamente, disculpa...
- no te preocupes por ello! -dije sonriendo y me despedi, volteando para entrar a mi casa...

Me fui directo a mi habitacion y ahi me encerre, tumbamdome boca arriba, un poco mareado de todas las cosas que habian ocurrido hoy...

Pase mis dedos por mis labios... Aun tenia la sensacion de los labios de Yunho... Era tan agradable...
"aish! Que demonios pienso!" Me levante rapidamente y me meti en la ducha, dandome un repentino golpe de agua fria... Aun vestido y con la cabeza gacha...

uhmm... u//u 2 (?)

ahh lamento la demora en escribir, pero había estado algo ocupado en fin ... seguiré contandoles...sobre esa noche...


Y si allí estábamos, entre los besos y las caricias....mi respiración cada ves estaba mas agitada, de aqui ya no pararíamos lo tenia claro, aunque mi mente pensara "es mi amigo" ...mi cuerpo decía "da igual" ... el ya había sacado mi polera y yo acariciaba su cabello, quería más. Nunca creí verme en una situación así con el, o sea se que me gusta...pero aun así no creí que seria esto tan uhm.. rápido.


No supe ni como ni cuando Changmin ya estaba sobre mi en el sillón de la de estar, de verdad el ambiente era un tanto uhm.. no se que palabra usar, pero me encantaba, bese el cuello de Min mientras metía mis manos bajo su polera y acaricia su espalda, para luego acaricia su formado abdomen, quien diría que el niño que conocí se transformo en la persona que me gusta y tendría este cuerpo, AH QUE RAYOS ESTOY DICIENDO!!!... >//< okey calma Jae, calma.... pero en ese momento no me resistí mas sacando lentamente su polera mientras lo observaba...luego nuestras miradas se cruzaron, viendo su mirada fija en mi, sonrie de lado y eso lo hacia ver aun mas ...sexy.... si >//< ya lo dije y que!! en eso dije....


-Changmin...porque...porque eres tan jodidamente sexy? -susurre en su oido mordiendo el lobulo de su oreja.


en ese momento solo atrajo mas mi cuerpo al de él y lo bese nuevamente, el ambiente cada ves se hacia mas caluroso y ya no habla vuelta atrás... eso lo tenia mas que claro 

Entrada 29

Ya sé, tanto tiempo ha pasado desde mi última entrada, pero es que he estado pensando una infinidad de veces sobre lo que paso aquella larga noche.

Yo estaba resignándome a que Jae no vendría, después de todo no tenía por qué hacerlo, no era su obligación cumplir mi capricho, y cuando estuve por irme a la cama, escuche el timbre de mi puerta, así que me levante de un salto para ir casi corriendo a abrir, estire mi mano para quitar la llave y descubrí entonces que mi corazón estaba latiendo muy rápido, casi se salía de mi pecho, en mi cabeza solo me decía a mí mismo que era imposible que fuera el, pero a las tres de la madrugada ¿quién más sería si no el?, respire hondamente y al abrir nuestras miradas se cruzaron, me hice a un lado y le deje pasar, tenía en su rostro aquella expresión de confusión y transpiraba nerviosismo, lo conocía bien.

Camine con lentitud hasta el y note su paso retrospectivo, pensé que no quería dejarlo ir, no ahora que me estaba muriendo de sed, entre abrí mis labios y note como sus ojos se clavaron de lleno en ellos, casi podía leer su mente y tenía en claro que deseaba lo mismo que yo, acerco su rostro con algo de rapidez y no fui capaz de reaccionar a tiempo, me estaba besando, así es…mi hyung me estaba besando por gusto propio, sentí una increíble emoción recorrer mi cuerpo, así que lo deje hacerlo.

Probar aquellos labios fríos y húmedos estaban comenzando a provocarme de un modo en que nunca creí, ya estaba decidido, tenía que tener todo de el, mis manos se colaron por debajo de su ropa, tocando su piel suave y tersa, mis dedos dibujaban su musculatura ligeramente marcada por aquellas horas de ejercicio diarias, ahora comprendía su obsesión por verse bien y entonces de un tirón me deshice de su delgada camisa, antes había visto su dorso desnudo, pero no con aquella claridad, no con el reflejo de la luna, no con aquella capa delgada de sudor, no con ese movimiento sexi de su respirar agitado, provocado por mi, por nadie más que por mi.

Yo sabía que esto iría más lejos y por primera vez, no me importaba.