Entrada 27

Esa noche me quede de verdad muy confundido, no entendí nada de lo que acaba de pasar, porque nunca en mi vida me imagine que Jae reaccionaria de ese modo, aunque...¿podría ser que estuviera celoso?, entonces fue cuando me di cuenta que estaba con esa risa idiota pintada en mi cara, pero ¿porqué me reía? ah! soy un tonto.


No estaba seguro de qué era lo que yo buscaba en él, por que después de mi altercado con Yunho, en verdad tenía miedo, y no era para menos, suspire lo mas profundo que pude y me deje caer en aquel sillón donde solía esconder una botella en caso de emergencia y si, adivinaron, definitivamente esto era una emergencia, ¿saben? nunca me a gustado el sabor que ese líquido tiene, pero lo que sea por olvidarme de todo, porque estaba hastiado de mi vida hasta ahora, yo no pedía mucho, solo quería terminar mi carrera para tener un buen trabajo, buena casa y una esposa linda que cocinara solo para mi ¡y ya!...


...pero tenía que enredarme con mi amigo, y encima estaba siendo perseguido por un loco violador, ¿qué en serio no me merecía algo mejor? tome mi celular y busque el número de Jae, realmente ¿me escucharía?, se veía tan molesto -ah!, ese idiota- finalmente mi orgullo fue mas fuerte, no lo buscaría, porque, yo no le había hecho nada, y era la verdad, no lo había hecho, tenía mi conciencia limpia, además yo  no tenía la culpa de que se imaginara cosas que no eran, pero lo que si hice, fue mandarle un mensaje de disculpas a Junsu -lamento mucho lo que Jae hizo, no es mala persona, solo lo tomaste en un mal momento, ¿repondremos lo que paso?- tal vez sonaba demasiado anti yo, pero ya sabía que con palabras frías no llegaría a nada, después de todo no me habían funcionado antes.

Pero no podía dejar de pensar en Jae, en verdad quería verlo, pero si me decía que no, no podría soportarlo, aguanta Shim Changmin, aguanta un poco más, porque a fin de cuentas es lo único que me quedaba ahora.

Le di un largo trago a la botella y sentí su sabor quemándome por la garganta y entre mas quemaba, más bebía ¿dónde pararía todo esto?


Deseaba ser rescatado pero no podía gritar ¿a quién quiero engañar? de nuevo estaba viendo parpadear la pantalla de mi móvil, escribí -te necesito- 


Y finalmente  luego de beber como si fuera el ultimo día de mi vida, lo envié a Jae y me quede dormido.